jueves, 4 de noviembre de 2010

Mapuche Fütamalon 1881

"Tüfei taiñ seña, rakin antü mülei tüfa meu, mülei ñi ñampiniengeal tüfachi püron kake antü, kiñelewechi püron meu, fei müleai fücha trawn fillpüle"[1]

“ Esta es nuestra señal, contiene los días contados, hay que deshacer un nudo cada día; el día que queda el ultimó, habrá concentraciones en todas partes"

El proceso político y militar de ocupación y dominación de nuestro Pueblo comienza con la creación de la provincia de Arauco en 1852, con esto se legitima la presencia winka en Wallmapu, teniendo como objetivo final la instalación de los grandes capitales de la época.

La estrategia de ocupación consistía en el avance de líneas fortificadas en los ríos Malleco (1868), Traiguén (1878) y Cautín (1881), con este avance se “limpian” terrenos, replegando a los mapuche hacia el sur, para la posterior construcción de pueblos y la colonización de quienes representaban el “progreso” para el Estado de Chile.

Posterior a la fortificación de la ultima línea, en el río Cautín, se realiza un alzamiento general Mapuche, y así finalizan casi 30 años de guerra, la que fue abiertamente una guerra de exterminio en contra de los mapuche, quienes desarrollaron diversas tácticas y estrategias para resistir por todo este tiempo, aprovechando el manejo del terreno y gracias a los hábiles estrategas mapuche. Esto alentó el alzamiento, se pensó que con el fuerte de las tropas chilenas combatiendo en el norte, existían mayores posibilidades de vencer.


Así transcurría 1881 y el descontento crecía, las primeras muestras de ello lo vemos en enero, cuando se realiza un segundo ataque al pueblo de Traiguén, lo que marca el inicio de un alzamiento generalizado en todo Wallmapu, a partir de esto se hacen cotidianas las emboscadas, se asedia a los fuertes y fortines, se queman haciendas y siembras de los invasores, además de sabotear las comunicaciones winka, cortando las líneas del telégrafo, de esta forma se encendía nuevamente la mecha de la rebeldía en Wallmapu.

Como respuesta comienzan incursiones de parte del ejército chileno, el que es constantemente hostilizado durante todo su trayecto. Sin embargo, se construyen nuevos puestos militares en la línea del Cautín, fundando en febrero los fuertes de Quino, con casi 300 efectivos del ejercito chileno, luego se funda Quillem, Pillanlelbun, y Temuco el día 23 de febrero, todos con una dotación similar de soldados, con esto quedaba claro que el Winka venia para quedarse y consigo traía y el avance depredador por la tierras.

Con esto, la insurrección general Mapuche estaba en marcha y solo se esperaba que finalizara el invierno, mientras algunos intercambiaban diversos artículos por Hierro, para la elaboración de puntas de lanzas, esto en Lebu, Cañete y Arauco. De esta forma, se utiliza la confrontación armada como última alternativa para detener la invasión Winka, ya el despojo era cotidiano, así como los asesinatos. El engaño, la codicia y la usurpación se quisieron detener con la lanza en la mano, así nuestros pu Werken cruzaron todo el Wallmapu, de punta apunta coordinando la resistencia.

El Püron Füu o cuerda con nudos, recorría las comunidades, pasando por las localidades de Makewe, Kajon, Llaima, Aillipen, Temuco, Victoria, Lonquimay, Quepe, Puren, Lumaco, Los sauces, Budi, Tolten, Boroa, Imperial, Chol Chol, Tirua, Carahue, Trovolhue, Newentue, Cañete, entre otros en Ngulumapu, y así también llega a Puelmapu desde donde viene un fuerte contingente de pu Weichafe.

"Al aclarar el día 4 se supo en toda la línea del Cautin la sublevación de los indios... Se esperan de un momento a otro grandes acontecimientos, porque se corre que toda la indiada esta alzada y que esperan solamente la voz de mando para dejarse caer sobre todos los fuertes chilenos, tanto los antiguos como los últimamente construidos."[2]

Tal como lo consignaba el mercurio, el día 5 de Noviembre, son atacados coordinadamente todos los reductos chilenos, se intento aislar a todos los fuertes, para evitar que se auxiliaran mutuamente. Son miles los Weichafe que se movilizan por todo el Wallmapu, destruyendo fuertes y ciudades, Quillem, Imperial, Purén, entre otras. Mientras que en otros casos, solo se logro acosar, sitiar y destruir parcialmente las fortificaciones, siguiendo antiguas estratagemas y tácticas, tales como, ataques en oleadas y por distintos puntos.

Se realizaban ataques y posteriormente se retiraban con intención de cansar a las tropas chilenas y agotar sus municiones y así tomar el pueblo por la noche, como sucedió en el ataque a Lumaco, en donde además se quiso atacar desde el interior. Para ello, algunos Lonko que históricamente habían sido aliados chilenos, se presentan ofreciendo ayuda, esperando ingresar y actuar desde el interior al momento del combate, sin embargo los Lonko, Mamkemilla, Kanuleo y Pinoleo y sus Weichafe son tomados prisioneros y algunos de ellos ejecutados durante la noche.

Sino fuera por la llegada de tropas y municiones enviadas por Gregorio Urrutia, los que fueron enviados desde el norte, llegando en la mañana, cuando se aprestaban los Weichafe al ataque final, el triunfo Mapuche se hubiera obtenido,

Mientras, en el ataque al fuerte de Ñielol se intentaba ocupar una antigua estratagema mapuche, dirigidos por Millapan. Durante la noche se trato de ingresar al fuerte haciéndose pasar por comerciantes, disfrazados los weichafe con cueros de ovejas, e imitando los balidos de vacas y ovejas, rodearon el fuerte, esta vez no resulto, el fuerte ya estaba en aviso y los mapuche traidores habían conducido a las mujeres, a quienes se les había arrebatado las ovejas y carretas para la ejecución de esta acción. Igualmente en Temuco son rechazados, a pesar de causar enormes daños en las instalaciones triunfa la superioridad de las ametralladoras y cañones.

Finalmente el alzamiento duro por alrededor de una semana, y para ser sofocado el ejército tuvo que traer refuerzos de distintos lugares como Concepción, Talcahuano y Santiago con soldados de las tres ramas del ejército, son alrededor de 4 mil, los hombres que sofocaron el alzamiento Mapuche.

Los principales factores que marcan la diferencia son, el ferrocarril, que permitió la movilización rápida de contingente desde Santiago, el telégrafo y principalmente la superioridad de las Ametralladoras y cañones frente a lanzas y una que otra arma de fuego mapuche.

Además otra diferencia de este décimo levantamiento general, es que el campo de acción del ejercito Mapuche era desde Malleco al sur, a diferencia de los anteriores, que se realizaron en la totalidad del territorio mapuche original, esto es del Bíobío al sur, lo que sin duda marco una desventaja para la guerra móvil que desarrollo nuestro Pueblo, además de eso hubo Weichafe que no alcanzaron o no pudieron actuar, ya que existía una división del ejercito chileno ambulante tras de ellos. Importante de destacar es que en esta ocasión se combatió en el terreno del enemigo, debido a la contingencia, no así como anteriormente se había desarrollado la guerra desde los tiempos de Leftraru, en donde eran los Mapuche los que definían el donde y el cuando.

A pesar de que en esta ocasión no fue favorable para nuestro Pueblo, este hecho marca un hito en la historia Mapuche: el camino de resistencia, nuestros antiguos comprendieron lo que se venia e hicieron lo posible y lo imposible por detener la invasión, aun cuando esto significara regar la sangre Mapuche en defensa de la libertad, por ello es necesario recordar y nunca olvidar que nuestro Pueblo resistió la invasión del Estado y el Capital y lo hizo de pie y combatiendo.






Actividades por Pablo Vergara y Araceli Romo‏




Ajuntamos afiche con actividades en conmemoración de Pablo Vergara y Araceli Romo, en Villa Francia:

Viernes 5, 20:30 hrs.:
Velatón y pantallazo, 5 de Abril con Quemchi, 20:30 hrs.

Sábado 6, desde las 11:00 hrs.:
Campeonato de Fútbol en Yelcho c/ Los Bosques

Te esperamos!